Información
Descargar Docx
Leer más
Así que después de la iluminación, después de la iniciación, sentirás cada día que Dios está cuidándote. Realmente es así en todos los sentidos, en cualquier situación, cosas pequeñas, cosas grandes. Dios realmente nos cuida y nos ama, y suaviza las cosas para nosotros. Nos ayuda en accidentes, en enfermedades. Nos ayuda en nuestros días oscuros, nos ayuda de todas las formas. Entonces podrás saber que Dios verdaderamente existe. Sentirás el abrumador poder del amor protegiéndote y amándote. Eso es Dios. Por eso la gente dice que Dios es Amor.Solo tenemos que elevarnos a un mundo más elevado y glorioso, para estar cerca de nuestro Dios Todopoderoso. El océano de amor y misericordia es lo que llamamos Dios. No es un ser, aunque a veces pueda manifestarse como un ser para que nos sintamos cerca, para poder tocarlo y comunicarnos con él. De lo contrario, es solo un océano de amor y misericordia, bendición y compasión. Todo lo que es bueno y alegre, eso es Dios.Nosotros mismos, en este momento, incluso sin iniciación, sin conocer nuestra sabiduría innata, nuestro poder Celestial innato, aún somos Dios. Cada vez que manifiestas amor hacia tu prójimo, hacia tus hijos, tus amigos, tus familiares o cualquier persona necesitada, estás manifestando a Dios. ¿Entiendes? Así que cuanto más manifestamos este tipo de compasión, amor, misericordia y sabiduría, más cerca estamos de Dios. Pero Dios en este sentido es demasiado limitado. Solo podemos ayudar a un puñado de personas a la vez. Dios, en el sentido último, puede ayudar a todo el mundo. Así que este es el objetivo por el que nos esforzamos. Esto es lo que Buda y Jesús alcanzaron.Ahora, la bondad y la energía positiva están junto a las energías negativas. Cada vez que cualquier ser, sean ángeles o personas de la Tierra, cuando generan bondad, tolerancia, amor, compasión y cooperación entre sí, entonces estas energías serán clasificadas como buenas o fuerza Divina, poder positivo. Cuantos más seres generen este tipo de bondad, más poder positivo tendremos en la atmósfera o en nuestro mundo. Y cada vez que nosotros o cualquier ser generemos odio, malos pensamientos o cualquier tipo de tendencias negativas, acciones o palabras, añadimos más al almacén negativo de la atmósfera. A eso le llamamos mal. Y esta fuerza cosechará más odio, más guerras, más falta de armonía en nuestro mundo, o en cualquier mundo en el que estas personas suelan residir.